jueves, 28 de octubre de 2010

Madrugada del 28 de Octubre.

Escucho de fondo los ronquidos de Leo.
No me he vuelto a acostar con él desde que actualicé recordando a Hubert.
Me gusta estar así, de nuevo, por segunda vez.
No tengo nada con lo que actualizar, porque lo único que me pasa por la cabeza es siempre, siempre lo mismo. Creo que ha llegado a tal punto que me da miedo aburrirme a mí mismo cuando en el guturo lea todas mis actualizaciones pasadas. Hasta ahora no he leído ninguna entera por vergüenza.
Estoy cansado, pero mi situación es manejable dentro de mi estado de semidepresión absurda.

Bona nit.

No hay comentarios:

Publicar un comentario