domingo, 24 de octubre de 2010

Madrugada del 25 de Octubre.

La noche de ayer fué algo extraña, realmente no me esperé nada de lo que presencié.
Después, todo volvió a la normalidad, más o menos. No tengo ganas de describir esto con detalles.

Llegué a mi casa a las 5 de la tarde, muy mareado y con dolor de cabeza, y barriga, y la nariz congestionadísima. Me conecté a Tuenti, como de costumbre. nada especial, estuve charlando por chat con Marjory y con Eleanor, y algún conocido más.
Entró un poco más la tarde, y me aburría. Así que decidí empezar a cotillear fotos, perfiles de gete que conocía, etc, etc. Llegué al perfil de Chobits. Ese chico es realmente divertido, pero por desgracia de forma un poco más cruel. Sus fotos son... bueno, él les da un toque personal que no cualquiera sabría darle. y eso me hace reir mucho. Pululando por sut uenti, ví una foto suya en mayas, creo. Oh Dios mío, qué imagen más grotesca y a la vez tronchante. Cuando pude parar de reírme, copié el link, y busqué a Hubert en el buscador, para enviarle un mensaje privado con el link de la foto.

Ahí está el problema, me enajené, no sé qué se me pasó por la cabeza, que iba a enviarle el link a Hubert, como haía antes, como cuando nos reíamos, y estaba todo bien. La verdad es que eso me sentó bastante mal, me enfadé un poco conmigo mismo, porque a mi parecer la situación no requería que en ese momento tuviese que recordarle a él, para variar. Es más, ahora mismo me da mucha rabia tener que escribir esto, porque no me gustaría tener que hacerlo. No me gusta tenerle tan jodidamente presente día a día, sin que desaparezca ni un puñetero minuto desde que pasó todo eso.

Me deprimí considerablemente, así que decidí ocupar mi cabeza en otros asuntos, y me puse a hablar con todo el mundo por Messenger. Abrí una conversación con Abel, mi ex de Madrid. Estuvimos charlando más o menos como siempre, no animadamente, dado que con él no puedo tratar de temas que realmente me interesan, pero bueno, me entretuve. Hasta que bueno, me molesté por ciertos comentarios que hizo sobre Leo, y le dije que me iba con él, que me aburría. Me respondió algo así como "folla bien", o "fóllatelo". No lo recuerdo con total nitidez, pero el caso es que eso sí que me molestó realmente. ¿Qué coño se ha creido? ¿Acaso tiene él derecho a decirme algo así? ¿Y a, de alguna forma, desacreditarle?
Pues sí, si no quisiese tanto al estúpido de Hubert sí, habría ido y me lo habría tirado, mil veces. Porque de él no me atrae su físico, que también, a original no le gana nadie. Me atrae más su conversación y su atención que otra cosa. Cosa que él, estoy seguro, nunca me podría dar ni me ha dado en todo el tiempo que le llevo conociendo.

En fin, después de ese momento de indignación, perfectamente atribuible a mi estado de enfado-melancolía, me fuí de mi casa. Anduve una media hora por la calle, y después fuí a ver a Leo, y no, no lloré. No le hizo falta saber mi estado de animo para entenderme, y le faltó tiempo para hacerme entrar en su casa y abrazarnos. Como de costumbre, después empecé a llorar. Vaya, la verdad es que no sé como a estas alturas no he muerto deshidratado, porque últimamente estoy muy sensiblero e inaguantable yo. Eso sí, evito no resultar pesado, aunque bueno, si no lo resulto ya...

Volviendo al tema, empecé a llorar, y él me siguió abrazando. A los 10 minutos, cuando ya me desahogué todo lo que necesitaba hasta el momento, le dije que no podía respirar bien porque tenía la nariz congestionada. Me hizo una infusión de hinojo, que no sé exactamente que es, pero yo empecé a marearme mucho, y empecé a verlo todo mejor. Me puse de mejor humor.

Llegué a mi casa, y el buen humor se me fué en poco tiempo. Me enfadé con el mundo, y me he desactivado todas las redes sociales en las que yo estoy registrado. Exceptuando mi Fotolog, y el blog, obviamente.
No me borré todo por mi enfado con el mundo, que tambien, pero también, digamos que, no sé, creo que me vendrían bien unos días en los que poder "no existir". Por supuesto, envié un breve mensaje a Marjory por Facebook antes de cerrarmelo, poniendola al día de mi decisión.

Al parecer, ella se preocupó, mucho, y bueno me envió un correo electrónico y me llamó unas pocas veces al móvil, el cual tenía apagado. Al leer el correo, encendí el móvil, y hablé con ella.
Estaba realmente preocupada, y bueno, le expliqué que no, no hay motivos para preocuparse. Mientras no me vuelva loco todo irá como la seda.

Y bueno, ahora lo escribo todo aquí, ya que está todo en calma. En la mayor calma que puede haber dadas las circunstancias. Tengo maría, cortesía de Leo, así que me haré una cachimba y me tumbaré al suelo, a ver qué se me pasa por la cabeza. Y después iré a dormir, que ha sido un fin de semana algo difícil, y mañana trabajo, aún con dolor de cabeza y piercings recién hechos.

Bona nit.

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